NAVIDAD:
El Sueño de Dios para el mundo.
Por el Lic. Gustavo Pizzi
Estamos a principios de Diciembre y nos preparamos para celebrar la Navidad. Quería desde estas líneas reflexionar en torno a esta fiesta. Cae de maduro en nuestra sociedad impregnada de la concepción cristiana del hombre y del mundo que la fiesta tiene un sentido: Celebrar el nacimiento de Jesús. Más allá de todo el “merchandising” propio de la Navidad: El árbol, los regalos, la cena de Nochebuena, la juntada familiar, los desencuentros familiares, la angustia por los que no están, etc.
Me gustaría reflexionar sobre el hecho mismo que celebramos en esta Navidad.
Un hecho que ha cambiado la historia dividiéndola en dos. No es un hecho menor. El niño que nace en Belén no es un niño más. Para los cristianos, sus discípulos, es el Hijo de Dios hecho hombre.
Este nacimiento significó el inicio del cristianismo. Y el niño de Belén trajo una “una buena noticia” (Eso significa la palabra Evangelio: Eu: buena. Angelos: Noticia) esta es que Dios no nos dejó solos, se hizo uno de nosotros. Pero eligió hacerse pobre. Este es el misterio. Por qué Dios se hizo pobre…El niño ya adulto nos va a dar la clave.
“Bienaventurados los pobres, porque de ellos es el Reino de los cielos” , “Porque tuve hambre y me diste de comer, sed y me diste de beber…” el Dios que nace en Belén nos invita a despojarnos de todo lo que no es esencial a nuestra humanidad. La soberbia, el dinero, la avaricia, el individualismo, la hipocresía…
Venimos desnudos al mundo y nos vamos de la misma manera. Vivir de verdad la vida significa saber que sólo importa el Amor a Dios y a los demás…Las otras cosas son de utilería “Busquen el reino de Dios y su Justicia y lo demás se les dará por añadidura “..:Qué es este reino del cual El es REY. Es un Rey crucificado al lado de dos malhechores, llorado por su madre, un joven y una ex mujer de la vida. Un Rey un poco difícil de entender. Un rey despreciado y humillado por los poderosos pero vivo en el corazón de los que aceptan vivir según sus normas. Que no son muchas pero si muy exigentes: Amar. “ Si tienes dos túnicas, dale una al que no tiene, si te piden que les acompañes una milla, hazlo dos..” “ Fíjense las flores del campo no siembran ni cosechan…” Vivir según sus valores no es tarea sencilla pero cuando se entra en su dinámica se transforma todo. “Hay más alegría en dar que en recibir” …Es increíble pero su lógica funciona y es maravilloso cuando sucede el milagro de su presencia en nuestras vidas. Y eso se multiplica.
Quizás allí este la clave de su permanencia en nuestras vidas por 2000 años. Su reino no está terminado, se está haciendo…Es un “ya si pero todavía no”…Se hace día a día en el compartir de una madre y su hijo, se hace en el corazón de miles de personas que dejan todo para seguirlo, para decir que El está vivo, que El es la razón de su existir, que su Reino no se ve pero está.
Hay detractores, que se venden por unas monedas, otros que dicen ser sus seguidores y lo niegan día a día con sus acciones, otros que se arrepienten lo encuentran de nuevo, muchos que lo buscan sin saber….hasta que un día lo encuentran…y dicen como San Agustín: “Tarde te amé, tarde te amé, hermosura tan antigua y siempre nueva”…
Celebrar la Navidad es volver a creer que es posible el sueño de Dios para el mundo: que todos seamos hermanos.
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