El profesor Emiliano Bertoglio nos comparte su libro Tierra Madre
Tierramadre. Tensiones
y luchas en el Sur del mundo: hombres, máquinas y árboles, editado
en 2014, propone un recorrido que permita leer de alguna manera el modelo de
Hombre que la modernidad occidental ha configurado en esta parte de América,
presumidamente civilizado y exonerado
de la naturaleza, frente a otro sujeto, vernáculo, que prevalece en la barbarie y sometido a las fuerzas
elementales.
Pero
este hombre que se cree liberado de sus orígenes animal y vegetal, emancipado
de su América, cabalgando en la omnipotencia de andar domesticando lo que se le
cruce, que ha cortado su cordón umbilical con su Tierramadre, es miope a que ha internalizado más de lo imaginado
aquello que niega: porque desconoce que si desmontara su rutina de ciudad para
empezar a verse el verdadero rostro se descubriría como parte inalienable de un
continente que viene desde la semilla, desde la hermandad, desde el sueño por
liberar una tierra expropiada por más de quinientos años.
Dice Pablo Rosalía en
el prólogo del libro: Para iniciar el
prólogo de las siguientes páginas es necesario primero calmar una ansiedad:
aquella generada por el descubrimiento de una obra muy esperada, no porque el
autor se haya tomado su tiempo, sino porque al igual que la lluvia que debe
llegar, uno se pregunta cuándo, dónde y de qué manera caerá. Esta obra no se
construyó; germinó. Así que no tenemos un libro, sino una necesidad de la
Tierramadre de pronunciarse. […] Muchas de las pruebas a las que se remite
Bertoglio tienen que ver con las conductas de nuestro día a día, o sea, esas
que se expresan en las cotidianeidades supuestamente irrelevantes, inocuas y
superfluas, pero que sin embargo, alimentan la bestial caldera que mueve y da
sentido a este modelo líbero-capitalista y de consumo desenfrenado. En ese
sentido, Tierramadre es una sincera y bien intencionada invitación a mirarnos
todos –todos- al espejo.